Vivimos en un mercado cada vez más competitivo, con un cliente —tanto profesional como particular— cada vez más consciente de lo que compra. Los requerimientos normativos suben y la comercialización se globaliza en un entorno marcado por la presión de los países con menores costes productivos.

Ofrecer las máximas garantías, con los mayores estándares de CALIDAD, es una herramienta de venta de gran valor. Certificar los productos contra las normas armonizadas que les son propias y, en su caso, proceder a la colocación del Marcado CE, implica una serie de ventajas:

• Genera confianza ante clientes y proveedores, proporcionando seguridad.


• Abre nuevas perspectivas de venta y aumenta la eficacia publicitaria.


• Permite la libre circulación de productos en todo el ámbito de la Unión Europea.


• Evita barreras técnicas y prohibitivas avalando el cumplimiento de los requisitos oficiales.

La Certificación de Producto.
En primer lugar, no se ha de confundir la Certificación de Producto con la Calidad en la Gestión de la Organización, área de la que trata la Norma ISO 9001. La Certificación de Producto busca garantizar a clientes y consumidores en general que estos productos cumplen unas determinadas normas —generalmente de tipo UNE— en cuanto a elaboración, higiene y Calidad.

Básicamente, los requisitos para certificar un producto por medio de una entidad de certificación acreditada son el disponer de un Sistema de Producción que garantice una elaboración homogénea y estandarizada —con los consiguientes controles y análisis— y, por ende, de un documento o similar que ejerza de Pliego de Condiciones donde se expresen los requisitos mínimos de cada producto en cuanto a su elaboración o producción y en cuanto a sus parámetros de Calidad. Estos puntos suelen estar definidos en Normas UNE.

La empresa certificadora independiente (Organismo Notificado) dará fe de que el producto resultante cumple lo indicado en el pliego de condiciones, concediendo la marca correspondiente de Producto Certificado.

IDÉTICA le asesora durante todo el proceso, ayudándole en la gestión de los procesos que desemboquen en la concesión de la marca. También le podremos indicar el organismo certificador que más se adecue a las características de su producto y de su empresa.

El Marcado CE, un concepto armonizador.
Con el fin de armonizar los distintos procedimientos de evaluación de la conformidad y eliminar los obstáculos a la libre circulación dentro la Unión Europea (UE), se creó la Política del Nuevo Enfoque y la figura del Marcado CE. Así, el Marcado CE es ahora un requisito indispensable para comercializar un producto en cualquier país de la UE, y cuando el logotipo se coloca sobre un producto indica que éste es conforme con los requisitos esenciales de las Directivas Comunitarias que le son de aplicación.

Evidentemente, de este concepto se deriva que uno de los primeros pasos para efectuar el marcado sea identificar las posibles Directivas que aplican a nuestro producto. Estas Directivas aportan criterios cualitativos —que no sea molesto, que sea un equipo seguro... — que habremos de cuantificar a través de las Normas (rangos, niveles de medida para la comprobación de los equipos, y otras).

Además, si las normas que utilizamos son Normas Armonizadas, éstas dan directamente presunción de Conformidad con los requisitos esenciales de la Directiva. Por ello, y aunque ninguna norma como tal sea obligatoria, el decantarse por la utilización de una Norma Armonizada es el camino más directo y fácil para la certificación y obtención del Marcado CE.

En otras palabras, antes de comercializar un producto al que le resulte de aplicación una de las Directivas, el fabricante debe someterlo a un procedimiento de evaluación de la conformidad con vistas a colocar el marcado CE que le permitirá su exportación. Las Directivas prevén distintos procedimientos (módulos) que se refieren fundamentalmente a la fase de diseño, de producción o ambas, de acuerdo con las categorías de productos que amparan y los riesgos implicados, concediendo en ocasiones libertad de elección al fabricante.

IDÉTICA le informa sobre si su producto está afectado por el Marcado CE. Y, en caso afirmativo, le ayuda en todos y cada uno de los pasos a seguir hasta la elaboración de la Declaración de Conformidad y la posterior colocación del logotipo CE.

Los pasos a seguir.
La obtención del Marcado CE es un proceso bastante complejo, que con la colaboración de IDÉTICA se hace mucho más transparente. Nuestros expertos liderarán todas las fases del mismo (ver figura inferior) elaborando las documentaciones pertinentes y coordinando la intervención, en su caso, de los organismos implicados. Cuestiones como la Declaración de Conformidad del Fabricante, la elaboración del Expediente Técnico, del Manual de Instrucciones… Son ahora más sencillas con nuestro asesoramiento.

(fuente: IDEPA)