El Modelo EFQM (European Foundation for Quality Managment) es conocido como un marco de Calidad Total, en cuanto a que está destinado a satisfacer las expectativas de los clientes, pero también a satisfacer las necesidades de los trabajadores, de los accionistas/participantes de la organización, y de la sociedad en general.

La Calidad Total es un concepto en si mismo, que se perfila como una filosofía, una estrategia, y un modelo de hacer negocios. Según la International Organization for Standarization (ISO), la Calidad Total es “la totalidad de características de una entidad que le confiere la capacidad para satisfacer necesidades explicitas e implícitas”. Trasciende, pues, del ámbito de la producción hacia toda la empresa y sus relaciones exteriores.

La implantación de la Calidad Total como sistema de gestión mediante el modelo EFQM supone un proceso de cierta complejidad que puede llevar implícito un cambio en la forma de gobernar y gestionar la empresa. El Modelo EFQM de Excelencia, también llamado Modelo Europeo de Calidad, está siendo aplicado por organizaciones de todo tipo como guía de referencia en la búsqueda de la excelencia empresarial. Se trata de un modelo no-preceptivo que trata de medir la excelencia de las organizaciones a través nueve criterios, de los cuales cinco son agentes facilitadores —que tratan sobre lo que las organizaciones logran— y cuatro son resultados, que son la consecuencia de los agentes facilitadores. Las organizaciones excelentes son aquellas capaces de lograr resultados sobresalientes para sus grupos de interés (clientes, trabajadores, accionistas, sociedad...) y mantener este nivel de resultados en el tiempo (mejora continua, innovación, adaptación ante cambios...)

L@s consultor@s de IDÉTICA podemos aplicar este Modelo de principio a fin en su entidad. Guíese por nosotr@s.